viernes, 6 de noviembre de 2009

B151.1 MI 14 Clasificación por colores en bibliotecas para niños

UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALA
FACULTAD DE HUMANIDADES
ESCUELA DE BIBLIOTECOLOGÍA
B151.1 BIBLIOTECA Y SOCIEDAD
SEGUNDO SEMESTRE 2009
LICDA. DORA CRISTINA GODOY LÓPEZ


MÓDULO INSTRUCCIONAL No. 14
CLASIFICACIÓN POR COLORES EN BIBLIOTECAS PARA NIÑOS

OBJETIVOS:

Durante el desarrollo del Módulo, el estudiante será capaz de:

Conocer la clasificación por colores en bibliotecas para niños, a través de la lectura y análisis de documentos, para saber utilizar dicha clasificación, según las necesidades del momento.
Participar con entusiasmo, en las actividades propuestas dentro del aula.
Enviar por correo electrónico, la tarea realizada, para completar así los trabajos escritos.

CONTENIDO:

Clasificación por colores en bibliotecas para niños:
Proponiendo el código Junior en colores

1Ma. Antonieta Ubillo Venegas
mubillo@derecho.uchile.cl
1 Bibliotecaria Documentalista titulada de la Universidad Tecnológica Metropolitana, con post-titulo en Gestión Bibliotecaria. Jefe de Servicios, Automatización y Circulación de la Biblioteca Central de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile desde el año 2002 y académico de la Escuela d e Bibliotecología, Universidad Tecnológica
Metropolitana desde 1994.

Resumen: Se revisa la clasificación por colores en bibliotecas, proponiendo el uso del Código Junior en Colores para aquellas bibliotecas infantiles y escolares, que adoptan el Sistema de Clasificación Decimal Dewey para organizar sus colecciones.

Palabras claves: Clasificación Decimal Dewey; Bibliotecas infantiles; Bibliotecas escolares, Código Junior en Colores; Organización de la colección

Abstract: The author review the classification by colors in libraries, proposing the use of the Junior Colour Code for childrens and school libraries, that they adopt the Decimal Dewey Classification.

Keywords:Decimal Dewey Classification; libraries for childrens; school libraries; Junior Colour Code.
“No hay espectáculo más hermoso que la mirada de un niño que lee. “ Günter Grass

El acercamiento al mundo del libro y la lectura, es una experiencia vivencial, incluso para aquellos que aún no aprenden a leer ni escribir. En la biblioteca estos pequeños usuarios, incursionan por un mundo nuevo, en el que el bibliotecario es una guía y apoyo, permanente. Este mundo es libre, pero no por eso un mundo caótico, ni aislado. En una biblioteca infantil como en cualquier otro tipo de biblioteca, ordenar y señalizar la colección, tiene como fin acceder libremente a los libros dispuestos lógica y coherentemente, en las estanterías abiertas para su exploración.

En Chile, la mayoría de las bibliotecas públicas, privadas y académicas utilizan el Sistema de Clasificación Decimal, creado por Melvin Dewey, para organizar los libros en las estanterías. Salvo algunas excepciones, podríamos decir que el 80% o más de los usuarios de bibliotecas sobre los 15 años en nuestro país conocen o ha acudido a una biblioteca cuya organización de colección en estantería es mediante el CDD. En cambio en España y otros países es ampliamente utilizado el sistema de Clasificación Decimal Universal CDU. Elegir el sistema, bajo el cual organizamos los libros, no es fácil, sobre todo cuando debemos adaptar sistemas universalmente conocidos, y pensar en la continuidad del desarrollo de habilidades de información en estos precoces usuarios.

Cuando hablamos de ordenar colecciones de textos infantiles, pensamos en el cuento, las historias de ficción (que corresponderían a la clase temática de literatura), pero existe aquella colección de no ficción. En muchas bibliotecas públicas con secciones infantiles, y escolares, los textos de ficción y no ficción son clasificadas según el público objetivo al que está destinada. En el mejor de los casos la ficción está identificada a parte y por niveles de usuarios, pero el resto de los libros caben en una misma gran categoría, también organizada por público objetivo. Los libros de no ficción para los más pequeños, debiera estar clasificado según su contenido pero no existe ninguna diferenciación entre un diccionario en imágenes para niños y un manual para maguitos, por ejemplo.

El diccionario es una obra de consulta, con ciertas particularidades que el niño ya comienza a adivinar, si se le guía en el proceso de acercamiento y utilización de la biblioteca. Un manual o guía para maguitos es un material de entretención, que cabe en la categoría de hobbies, son diferentes en cualquiera de los esquemas de clasificación para Bibliotecas, que se quiera utilizar.

Recopilando documentación sobre organización de colecciones infantiles, se detectó que en muchas bibliotecas infantiles, la Clasificación Decimal Universal y la Clasificación Dewey son entendidas como lo mismo, e incluso se identificaron documentos en Internet que así lo dan a entender. Asimismo, muchas bibliotecas para niños han organizado sus colecciones mediante el sistema Dewey, al cual le asignan aleatoriamente un color por clase, aún cuando existe el Código Junior en colores (Dewey para niños) que ya ha preestablecido los colores asignados por temas.

En la literatura europea, especialmente española, es ampliamente conocida la margarita cromática para bibliotecas infantiles, que es una adaptación del CDU, sistema que a su vez es derivado del Sistema de Clasificación Decimal creado por Melvin Dewey. Cada uno de estos sistemas tiene características propias, y aunque son similares tienen sus diferencias, asimismo, ocurre con ambas versiones adaptadas en colores.

Veamos los Esquemas de clasificación de la margarita cromática disponible en la Web http://gti1.edu.um.es:8080/jgomez/bibedu/pautasorg/intro/senalCDU.htm. Este esquema asocia cada decimal a un entero, apareciendo entonces 10 números, de los cuales el 4 no registra ninguna materia asociada. 2

2 También disponible en :Jordi, C. Guía práctica de la Biblioteca escolar. Madrid: GSR, 1998

Como se puede ver, se ha tratado de adaptar este sistema para los usuarios más pequeños, incorporando imagen y palabras, fácil de entender y asociar por los menores. La margarita cromática es una sola, y los colores no van variando. Aquí es muy fácil identificarla puesto que en el sistema Dewey, la clase de los 400, representa los idiomas y el lenguaje, mientras que en el CDU, esta clase está vacía.

Distinto es el caso del Sistema DEWEY adaptado para niños. Es sistema conocido como “Código Junior en Colores” adaptación de origen británico, propone clasificar los textos infantiles, en 10 grandes categorías asociadas a las clases principales del Dewey, a cada una se le asigna un color. Actualmente muchas bibliotecas desconocen que esos colores ya están debidamente distribuidos, por tal motivo se evidencian discrepancias entre una y otra biblioteca, así como proveedores de insumos, al momento de identificar una materia con un color específico

Por ejemplo, la página Web de Newmann Library de Brooke Weston City Technology College, explica la organización de su colección en su biblioteca a fin de facilitar a los estudiantes y usuarios el poder de ubicar fácilmente las materias en estantería, para tal efecto ha asociado cada clase principal del Dewey a un color. A su vez, establece colores adicionales para niveles de lectores, donde también hay discrepancias, con otras bibliotecas.

En Chile, muchos colegios han implementado biblioteca para niños, preescolares, o bien han organizado sus colecciones escolares, de acuerdo al sistema de Clasificación Decimal Dewey, sin embargo, no existe información en nuestro país acerca de los colores aplicados por materia bajo este sistema, por tanto esta asignación depende exclusivamente de la iniciativa del bibliotecario, fuera de toda normalización nacional o internacional. El siguiente afiche es un ejemplo de ello:

http://www.bwctc.northants.sch.uk/pages/Library/colour_code.html

El siguiente caso, es la biblioteca de Swinburne University of Technology, que ha incorporado distintos colores por materias. Aquí hay un problema, puesto que se supone que las colecciones infantiles son menos especializadas que las de una biblioteca universitaria, y el código Junior, está enfocado a colecciones simple, menos complejas y para un público objetivo que recién está aprendiendo sobre la organización del conocimiento. Aunque aquí tampoco ha sido adoptado, no es el mejor ejemplo para asociar materias a colores.

http://www.swinburne.edu.my/inforeso urces/lib_about.htm
En el siguiente cuadro podemos ver, las discrepancias y falta de normalización en la asignación de colores, por parte de proveedores de insumos para bibliotecas. Este afiche es vendido como material de apoyo a las actividades de desarrollo de habilidades de información en estos pequeños usuarios y como señalética para los estantes de biblioteca.

http://www.libraryskills.com/index.html

Sabemos que existen estudios de colores asociados a temas, pero no hay trabajos específicos en materia de clasificaciones temáticas del color. Tenemos claro también, que la adopción de cualquier sistema es una elección propia de cada biblioteca, pero debemos saber que si queremos usar el sistema Dewey, existe una adaptación absolutamente desconocida en algunos países, que ya ha hecho el trabajo de asignar colores a cada materia temática desarrollada por el sistema CDD, y por tanto es diferente al CDU para niños, conocido como margarita cromática.

Como se puede ver en la tabla, sólo hay dos coincidencias en el color de asociado a las clases temáticas, pero en general, hay diferencias sustanciales entre el Dewey y la CDU para bibliotecas infantiles. Sin embargo, se rescata de estos sistemas, que ambas clasificaciones procuran facilitar el acceso a la colección y unificar criterios; entonces, si esta normalización para ambos sistemas existe, la idea sería adoptarlas a nuestra realidad. El objetivo es aplicar el mismo criterio, si es que adoptamos el sistema Dewey para organizar libros en bibliotecas infantiles, a modo de establecer cierta continuidad en la información que manejan los usuarios para utilizar la biblioteca.

La idea entonces es presentar y dar a conocer este “árbol de colores” adaptado del sistema Dewey utilizando el código Junior en Colores. A continuación se propone la siguiente gráfica, que incorpora visual y cromáticamente las clases del sistema Dewey, en forma atractiva y fácil de comprender por los pequeños usuarios.3
3 Ver el desarrollo del esquema de clasificación en Baird, Nicola. Setting up and running a School library. London,VSO, 1994. Anexo.

Árbol de colores: Código junior en Colores

Ahora bien, en cuanto al tema de clasificación por nivel de usuario, también resulta un tema inexplorado en término de acuerdos y criterios por ejemplo en bibliotecas chilenas se ha usado las siguientes clasificaciones:

Círculo amarillo: para niños de 0 a 3 años
Circulo verde: para niños de 4 a 6 años
Círculo azul: para niños de 7 a 9 años
Circulo rojo: para niños de 10 a 12 años
www.biblioninos.cl

O bien
Amarillo = primeros lectores
Morado = lectores iniciales
Verde = jóvenes lectores.
http://www.providencia-biblioteca.cl/
El portal infolibro sugiere una clasificación por tipo de libros, pero además hay una agrupación por público lector:

Color rojo: A partir de los 8 meses :
Color azul: A partir de los 5 años (sic)
Color amarillo A partir de los 5 años (sic)
Color Verde: A partir de los 10 años
Color naranjo: A partir de los 13 años
http://www.infolibro.net/lectoresdivertidos/crisol/clasif_tematica.htm

Y en España la sugerencia curricular es la siguiente:
1 azul hasta los 7 años (poca letra y muchas ilustraciones)
2 rojo de 8 a 10 años (texto e ilustraciones por igual)
3 verde de 10 a 13 años (predominio de texto)
JN amarillo a partir de 13 años
http://www.pnte.cfnavarra.es/publicaciones/pdf/cdu_cas.pdf

Clasificar los textos para niños en biblioteca, desde el punto de vista del contenido y del grupo usuarios al que está destinado en las artes literarias (clase 800), no es excluyente, por lo cual, es factible y hasta recomendable, organizar la colección por colores en el contenido, sin agruparlos ni segregarlos físicamente, pero identificando en su lomo el nivel de usuario al que está destinado en el caso de los textos literarios. Entre las opciones observadas, personalmente, la segmentación hecha por www.biblioninos.cl es quizás la más clara.


Esta simple herramienta, adoptada cono una normalización, puede ser el punto de partida para aunar criterios y facilitar las políticas de ordenación de estanterías para bibliotecas infantiles y escolares.

Bibliografía

Baird, Nicola. Setting up and running a School library. London,VSO, 1994. 137 p.

Infolibro. Propuestas de clasificación temática y cromática para literatura infantil y juvenil.
Disponible en línea http://www.infolibro.net/lectoresdivertidos/ (visitado 25/07/2005)

Jordi, C. Guía práctica de la Biblioteca escolar. Madrid: GSR, 1998

Kittle, Bob. Color & knowledge organization in libraries. Disponible en línea en
http://www.syncategorematic.info/school/writtenwork/classification/color.html (visitado
25/07/2005)

La Clasificación Decimal Universal en los Currículos Escolares: Instrucciones para la
organización temática de los fondos bibliográficos de las bibliotecas educativas no
universitarias. Gobierno de Navarra. Departamento de Educación y Cultura ed. Disponible
en línea http://www.pnte.cfnavarra.es/publicaciones/pdf/cdu_cas.pdf (visitado 08/08/2005)


ACTIVIDADES

Para el 12 de noviembre

- Hacer conocimiento la información del Módulo.
- Preparar tres preguntas para discusión grupal, relacionadas con el contenido del mismo.
- Participar activamente en la discusión de la temática propuesta.

Para el 13 de noviembre

- Subrayar los párrafos destacados del Módulo.
- Elaborar un resumen indicativo del documento

NOTA: Con base en el libro Importancia de las citas textuales y la bibliografía en la investigación universitaria:.. Elaborar la bibliografía de los documentos utilizados para la realización del Módulo.
















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